El tenista suizo Wawrinka sorprendió a todos en la final de Roland Garros ganándole al actual número 1 del mundo, Novak Djokovic. El deportista, que en 2014 había sido eliminado en primera ronda y en esta edición fue campeón, es embajador de la firma de Alta Relojería Audemars Pigue.
La firma suiza lo apoyó a lo largo de todo este torneo de gran prestigio y estuvo presente en la muñeca del tenista suizo con una de sus piezas. Wawrinka llevó su fantástico Royal Oak Offshore que no solo le sirvió como amuleto de la suerte sino que también lo vistió de elegancia y precisión dentro y fuera de la cancha en los festejos.
Tras el triunfo el deportista suizo agradeció a su equipo, a los organizadores y entre risas prometió volver a ser campeón.