Una verdadera reliquia de la firma italiana de autos Ferrari fue vendida por la exorbitante suma de US$ 70 millones de dólares. Se trata de un ejemplar del modelo 250 GTO que fue adquirido por el coleccionista norteamericano David MacNeil.
Este espectacular automóvil es uno de los 33 de esta versión que salió al mercado en 1963 y ya es considerado el coche más caro del mundo. Tiene muchas historias bajo sus ruedas, como por ejemplo el de haber ganado varias competiciones, entre ellas las 24 horas de Le Mans en 1963.
En cuanto a sus prestaciones, que se conservan intactas como todo su chasis y estructura general, se destaca su motor V12 de 3.0 litros, que le permite una potencia de alrededor de 300 caballos de fuerza.